Reconozco que preparar la entrada anterior me sirvió para aclarar mis dudas sobre la numeración de los monoplazas. Sin embargo, la foto que podéis encontrar debajo, en la que aparece Damon Hill en el GP de Gran Bretaña de 1994, me planteó otra duda. La foto muestra al inglés dando la vuelta de honor al circuito tras vencer en dicho GP, enarbolando la Union Jack y a lomos de un Williams con el número… ¡0!
Damon Hill, profeta en su tierra en el año 94
Quedaban dos años para que la organización impusiese la numeración (gracias a eso, los Ferrari de Alesi y Berger todavía podían lucir los míticos 27 y 28) pero aún así es curioso que un piloto optase por el 0. Sin embargo, esta elección no era casual…
La tradición, que no la organización (todavía), exigía que el campeón vigente llevase el nº 1. Pero, ¿qué pasaría si el vigente campeón no disputase el campeonato? ¿Quién llevaría el nº 1? Pues precisamente eso sucedió dos años seguidos, y eso explica el número 0 de Hill… en 1992 un longevo Nigel Mansell se hacía con el título y se retiraba inmediatamente después. El equipo Williams, por tanto, tenía derecho a rotular con el codiciado número 1 el primero de sus monoplazas, que conduciría Prost. Sin embargo, en un ejercicio de humildad, El Profesor se negó a llevar un número 1 que no había ganado en la pista y prefirió el 2. Con el fin de no perturbar la numeración del resto de equipos y monoplazas, el segundo piloto de Williams, Damon Hill, eligió llevar el número 0 esa temporada de 1993.
Al año siguiente, se repitió la carambola. Prost se hizo con el Mundial en 1993 pero se retiró a final de año, por lo que Williams de nuevo debía asignar los números 1 y 2 a sus pilotos. Senna, primer piloto de Williams, y que se había mofado de Prost por no querer llevar el número 1 el año anterior, se niega también a llevar el 1, por lo que Hill repite y disputa el Mundial de 1994 con el número 0.
Hay quien dice que Hill prefirió llevar el 0 al 1 en homenaje a su padre, que había portado también el número 00 previamente, en LeMans 1963, cuando compitió con un extraño e innovador prototipo de Rover-BRM basado en un motor de turbina tipo jet. Al correr como un prototipo, la organización del evento francés decidió finalmente numerar el original spider con el doble cero. Así, en su memoria, Hill junior cerraba el círculo y estrenaba en el gran circo el número 0.
Al año siguiente, se repitió la carambola. Prost se hizo con el Mundial en 1993 pero se retiró a final de año, por lo que Williams de nuevo debía asignar los números 1 y 2 a sus pilotos. Senna, primer piloto de Williams, y que se había mofado de Prost por no querer llevar el número 1 el año anterior, se niega también a llevar el 1, por lo que Hill repite y disputa el Mundial de 1994 con el número 0.
Hay quien dice que Hill prefirió llevar el 0 al 1 en homenaje a su padre, que había portado también el número 00 previamente, en LeMans 1963, cuando compitió con un extraño e innovador prototipo de Rover-BRM basado en un motor de turbina tipo jet. Al correr como un prototipo, la organización del evento francés decidió finalmente numerar el original spider con el doble cero. Así, en su memoria, Hill junior cerraba el círculo y estrenaba en el gran circo el número 0.
Hill padre al volante del Rover-BRM numerado 00
Como desde entonces nunca un piloto se ha retirado el mismo año de haber ganado el campeonato, no se ha podido volver a dar esta situación y Hill sigue siendo el piloto que ha competido con el número de monoplaza más bajo, el 0.
Por el contrario, el número más alto con el que se ha competido fue… bueno, eso lo dejamos para la próxima entrada, ¿os parece?