miércoles, 24 de noviembre de 2010

Sobre el precioso Jordan 191

Mi debut en los GP (de espectador, por supuesto) fue el GP Mónaco’2003. Tras ver cómo el hermanísimo (Ralf) acorralaba a Alonso en el túnel, dimos unas vueltas al circuito y, anocheciendo, nos dirigimos a la zona del puerto. Después de ver, desde fuera, claro, la fastuosa fiesta de Jaguar, donde acudieron Brad Pitt y George Clooney, entre otros, y la que había montada en la cubierta superior del yate de Montoya, nos encaminamos de nuevo hacia Montecarlo. Y por allí apareció Eddie Jordan.


Iba montado en una sencilla bici, acompañado de una rubia cuarentona con la que, aparte de la bici, iba compartiendo carcajadas. Campechano, le vi algo sorprendido al oírme gritar “¡¡¡Eddie!!!”, quizá porque había usado el tono de alguien que le conociese de toda la vida. Sonriente, correspondió con un saludo. Cuando le vimos llegar casi sólo, sin el séquito que acompañaba a Bobby Rahal, Ron Dennis o cualquiera de los pilotos punteros, en una bici, y entrando a un yate ostensiblemente más modesto que los demás, me dio la impresión de estar viendo un extraterrestre, un tipo que, aunque diese 1.000 vueltas en muchos sentidos a muchos otros patronos de equipos, no acababa de encajar en el mundillo de la F1.

De Eddie Jordan se podrían escribir libros, si no se han escrito ya. No esperéis encontrar en esta entrada algo inédito sobre él o una completa biografía. Simplemente es que, releyendo una vieja revista, vi la fotografía de una auténtica belleza creada por Eddie, y quería escribir sobre eso.

Jordan 191 (chasis nº5, en el que cabalgaron Gachot, Schumacher y Zanardi). © DC Photos, Jordan Grand Prix
Como veis, la belleza en cuestión se trata del Jordan 191, un coche especial por muchas razones. Fue el primer F1 de  Jordan, y el coche con el que debutó un tal Michael Schumacher en F1. A mi, además, sus formas y colores me encantan, me parece uno de los coches más bonitos de siempre. Su parte trasera es realmente estilizada, gracias al motor Ford que montaba, y la continuidad de los pontones la realza aún más. La combinación de colores fue un misterio hasta última hora, incluso durante la presentación del monoplaza, dado que los patrocinadores no estaban confirmados. Su habilidad en la negociación con los patrocinadores, amén de escándalos como el de Vodafone, es conocida. Prueba de eso es que consiguió patrocinadores inéditos en F1 como Fujifilm y 7Up.

La intrahistoria de este coche y, por ende, de los inicios de Jordan en la F1, no es menos bella. Y es que Eddie tuvo que sudar para poner este coche en parrilla.  Su director técnico, Gary Anderson, siempre reconoce que nunca pensó que Eddie fuese a conseguir el dinero suficiente. Tan desprevenidos les cogió que, cuando llegaron a su primera carrera no tenían puesto de señalización en el muro de boxes, así que tuvieron que improvisar uno con unos andamios la noche previa al GP.

¿Y eso del debut de Schumi en F1 con Jordan? ¿No debutó con Benetton? Si y no. Bertrand Gachot era el piloto oficial de Jordan en esa época pero, tras una desafortunada agresión a un taxista londinense, sufrió un arresto de 2 meses. El por entonces manager de Schumi, Willi Weber, vió el cielo abierto. Con su proverbial persuasión convenció a Eddie para que le diese la alternativa al, por entonces, desconocido Michael Schumacher.

Eddie aceptó dejar probar el coche a Michael aunque pidiendo, tan escaso andaba de presupuesto, que el test lo pagara de su propio bolsillo Willi. Michael lo hizo tan bien que no sólo consiguió la plaza sino que el equipo le pidió que dejara de castigar el motor puesto que iba a ser el mismo que tendría que usar durante la carrera y no estaba el equipo para grandes dispendios...

Siguiendo en la línea de recortes presupuestarios, Michael recuerda con cariño como durante el GP tuvo que dormir acompañado de Willi en un albergue juvenil. Como él mismo reconoce, estaba tan ilusionado ante tal oportunidad, que habría sido capaz de dormir en un camping.

Finalmente Schumi debutó en F1 en el circuito de Spa el 25-Agosto-1991 con Jordan-Ford. Es cierto que la mayor parte de la temporada (los 5 GP restantes) los corrió con Benetton, pero su debut fue a lomos del precioso coche verde que podéis ver más arriba.
Schumi en Spa'1991 en el Jordan 191. © sutton-images.com
Como anticipo de lo que habría de venir, Schumi logró un meritorio 7º puesto en calificación, mucho más si pensamos que nunca había corrido en Spa y que sólo pudo dar un par de vueltas en bici antes del GP. Aunque se rompió el embrague y tuvo que retirarse, sus méritos no pasaron desapercibidos para un tal Flavio Briatore, que le fichó inmediatamente para Benetton. Pero eso es otra historia…